martes, 9 de marzo de 2010

De puntilla por los Oscars

Marco epistemológico de esta entrada: al autor le interesan los Oscars lo mismo que los premios de la Gala del deporte, con un valor equivalente a los regalos de una máquina de esas que sacan bolas de plástico con chorradas dentro. Dicho lo cual, me doy un garbeo por algunos premios:

Me alegro que el Oscar a la mejor dirección haya ido a parar a Kathlyn Bigelow, una mujer de la que llevo hablando maravillas desde que viera Días extraños (peliculón que pongo a la altura Blade Runner porque yo lo valgo) y más aún cuando se me confirmaron las sospechas con K-19. The widowmaker (una de las mejores pelis de cine bélico de submarinos que he visto, más comedida que La caza del Octubre rojo - por cierto, debería echarle un vistazo a Das boot de Wolfgang Petersen para tener más referentes). No he visto El peso del agua (2000) ni En tierra hostil (2009), que son los otros dos films que completan su filmografía después de Le llaman Bodhi (1991). Tampoco he visto sus primeros trabajos: Los amantes (1983), Andrea y las narices frías (1984), Near Dark (1987) y Acero azul (1990), pero solo con las tres películas que sí he visto me fío, aunque, nuevamente, obedezca más a razones de saldar cuentas con la modernidad (hasta ahora no se había dado ningún Oscar a ninguna mujer como directora; como curiosidad, varios medios publicaron el hecho días antes de la ceremonia y como no creo en las casualidades no me sorprendió mucho la noticia). Creo que el Oscar es merecido porque la Bigelow ha demostrado un hecho que gente como su ex (James Cameron, el gran perdedor de esta entrega) y, sobretodo, Michael Bay se empeñan en desmentir película tras película. Se puede hacer cine de acción inteligente que no tiene por qué ser menos rentable que el cine de acción "imbécil" si se gasta lo mismo en promoción. De momento el Oscar le dará un empujoncito promocional y a partir de ahora las próximas películas de esta cineasta, acompañadas de la coletilla "... de la ganadora de un oscar de la academia...", llamarán la atención un poco más, que ya es de agradecer.



De igual modo me alegro de que El secreto de sus ojos se llevara el galardón a la mejor película extranjera. Ya avisé en algún espacio público que el candidato español se iba a comer los mocos (lo que me valió un aluvión de críticas cuando, discutiéndose todavía qué título mandar, me dió por sugerir que lo mejor era no enviar a ningún representante porque ninguno tenía oportunidad e íbamos a hacer el ridículo). La única película digna, para mí, de haber luchado por un Oscar era Mapa de los sonidos de Tokio de Isabel Coixet, descartada por una serie de razones que pareceron lógicas en su día. Se mandó El baile de la Victoria, una película "española" de Trueba que no es española en absoluto y que pasará al olvido, me temo, porque no aporta nada a nuestra cinematografía. El secreto de sus ojos es una película argentina (con algo de capital español, por cierto), hecha por un argentino, sobre temática argentina y, además, muy bien hecha. A riesgo de parecer nacionalista, cuando aquí se mande cine "español" con rasgos distintivos de autor y no pastiches mediocres que los americanos pueden hacer mil veces mejor que nosotros, entonces alabaré las decisiones. Desgraciadamente, hoy por hoy los cineastas españoles que hacen cine de autor están contados con los dedos de las manos (Almodóvar, Garci, Álex de la Iglesia, Agustín Díaz Yanes, Isabel Coixet, Fernando Trueba...), el resto hacen cine con subvenciones españolas y siguendo los parámetros comerciales de Hollywood. La película de Coixet se descartó porque hablaban en inglés. La de Trueba, que finalmente fue, no creo que sirva como paradigma de "cine español" y está a años luz de sus mejores películas. Luego está el problema de que no se puede mandar siempre a los mismos (porque no siempre hacen obras maestras, amén de que la gente se indigna si "siempre se manda a los mismos"). Como he dicho, no tiene sentido vender pizza de Alpedrete en Italia, por muy bien que te salga, pero eso a los yihaidistas a ultranza del cine español no parece importarles. Estamos, pues, ante un asunto peliagudo que a veces adquiere la categoría de "problemática nacional". Como siempre he sido más partidario de apreciar el cine en general que el cine con banderas, tampoco me importan mucho las lapidaciones públicas, así que seguiré defendiendo principios como el que este año nuestra candidatura tendría que haberse quedado desierta. No había películas a la altura.

Para terminar, la alegría más grande me la llevé cuando Jeff Bridges se llevó el Óscar al mejor actor principal. ¡Ya era hora! No solo porque crea que es un actorazo (que lo es, más allá de El Gran Lebowski, por el que yo le hubiera dado la estatuilla hace ya 10 años), es que es un tío cabal e inteligente como pocos. Tuve ocasión de verle en una entrevista en el programa de Henry Rollins donde habló de varios temas no solo cinematográficos, un hecho que me sirvió para tenerle en la mayor de las estimas. Por todo ello y a falta de ver su papel en Corazón rebelde, me alegro de que se le reconozca su trabajo de una vez.

Y el resto, la verdad, me da igual salvo algún apartado que ya estaba cantado como la mejor película de animación (Up es muy grande, aunque si se lo hubiera llevado Los mundos de Coraline, tampoco hubiera pasado nada). Otro año más pasó una gala sobredimensionada e intrascendente que solo ha servido para que periódicos, revistas y televisiones varias hagan gala de su arsenal de "expertos cinematográficos y cotilleriles varios" con los que rellenar contenidos.

5 comentarios:

Juli dijo...

No dices nada de Christoph Waltz!!

La Tremolina... dijo...

Hay directores españoles allende los mentados que dudo mucho que hagan hispanaméricas. Dese una vuelta por el cine catalán (entre otros). Desde luego, no creo que en USA se hagan las cosas que les da por hacer a alguenos de por allí (para bien y para mal).

PD. Palabra de reconocimiento: "schon" (guiño para Jafuda y para El que me acompaña, si me lee)

Jafuda Cresques dijo...

Eso eso,

Ni una mención a Waltz: ¡eso merece ser penado con una invitación a una cerveza! Y como Waltz no creo que venga a verle, ya la apunto a mi cuenta. ¿Cuela?

Saludos,
Jafuda

P.D. Palabra de verificación: ablati. No suena tan bien como "schon", pero es digno de mención.

Txetun: dijo...

Evidentemente, sita Tremo, he citado unos pocos solo. Le puedo decir que como buen cinéfilo me paseo de vez en cuando por el cine catalán. Desde Cesc Gay a Ventura Pons - creo que incluso Amic/Amat la ví en catalán con subtítulos - pasando por Balagueró (que sí hace Hispanamericanadas), Bigas Luna, Agustí Villaronga, Juan Antonio Bayona o Alex Olle/Carlos Padrissa/Isidro Ortiz - de La fura dels Baus que dirigieron Fausto 5.0, un revisionado de la obra de Goethe que es bastante entretenida... Estos son algunos realizadores catalanes, pero que no tienen por qué hacer necesariamente "cine catalán". Convendría que explicáramos primero este concepto... ¿Es cine catalán aquel que se hace EN catalán? ¿o es el cine que se hace DESDE Cataluña? ¿Tiene que llevar subvención de la Generalitat para se considerado cine 100% catalán?. A mí es que estas etiquetas me desconciertan mucho, como cuando se habla de cine nórdico y se pone como referente a Ingmar Bergman y se cuela de refilón a Dreyer, pero luego los del Dogma no entran ahí ni tampoco algunos directores fineses... ¿Uwe Bol es director de cine nórdico? porque es noruego, aunque se dedique a hacer remakes malos de videojuegos en Hollywood. :-P

De todas formas, y que conste que yo no lo vería mal, ¿cómo cree que sentaría mandar una película en euskera o catalán o gallego, independientemente de la temática, a los Oscars, auspiciada ésta por la Academia Española de Cine?

Por eso, le digo, que sin importar las banderas con las que se quiera etiquetar, prefiero degustar el cine, así, en general. "El baile de la Victoria" y "Gordos", para mí, no eran películas dignas de defender nuestra cinematografía en los Oscars. ¿Las razones? Haría falta más espacio para explicarlas. ;-)

Ps. Señor Jafuda, no tiene que recurrir a esas cosas para que le invite a algo. Eso sí, preferiría que corriera de mi cuenta en estos lares, mucho más económicos que por aquellos.

Ps2. No Juli, no digo nada de Christoph Waltz, pero tú tampoco has añadido nada. :-P

Anónimo dijo...

Ahora que funciona esto, un comentario en relacion a: Das boot. Es "la" pelicula de submarinos. La vi, en el cine semanas antes de la gala de mi mismo (por entonces valia dejarse llevar por aquello de nominada para .... Mas alla de que conto con el asesoramiento de uno de los comandantes de los lobos grises y que el film transmite increiblemente el ambiente claustrofobico, es para mi una de las mejores peliculas belicas de la historia, tal vez porque es una pelicula de los perdedores contada por ellos mismos (al igual que Stalingrad). La tengo y la sigo viendo de cuando en cuando. Muy recomendable