miércoles, 2 de septiembre de 2009

El origen del nombre

La etimología es, a grandes rasgos, el estudio del origen de las palabras. Muchas veces conociendo su origen podemos desentrañar mejor su significado, comprender completamente las palabras, domarlas y someterlas a nuestra voluntad... O eso me gustaría creer quizá influido por los excasos contactos con la hermenéutica. El caso es que ayer, al explicar el origen del título de este blog, me faltó un pequeños detalle. Parte de la inspiración está en una peli de esas que siempre tengo en el banquillo de mi lista de películas preferidas y, todavía mejor, como uno de mis libros de cabecera.



Tan recurrente que aburre, ¿verdad? Pero yo lo veo como un manifiesto que bien mirado puede ayudar a entender muchas cosas. Por cierto, la película se estrenó en 1999, lo que significa que ha cumplido una década la versión cinematográfica de esa joyita escrita por Chuck Palahniuk. Pero sigo con el hilo, que me pierdo. En El Club de la Lucha hay una conversación que el narrador y Tyler Durden mantienen y que tiene que ver con la incertidumbre que el título del blog plantea (tenéis un fragmento del libro en inglés en uno de los márgenes del blog, pero lo traduzco aquí)
"Tyler Durden: Mi padre nunca fue a la universidad, así que era importante el que yo fuera.
Narrador: Me suena.
Tyler Durden: Así que me gradué, llamé a mi padre, le dije: "Papá, ¿ahora qué?". Él me dijo, "Busca un trabajo."
Narrador: Me pasó lo mismo.
Tyler Durden: Ya con 25, hago mi llamada anual. Le digo a mi padre: "¿Ahora qué?" Me dice, "No sé, cásate."
Narrador: No puedo casarme, Soy como un niño de 30 años.
Tyler Durden: Somos una generación de hombres criados por mujeres. Me pregunto si otra mujer es la respuesta que necesitamos."

Muy en la línea del inicio de otra película basada en un libro de culto (perdón por la calidad de la imagen, pero era esto o ponerla doblada con la estúpida voz que eligieron para Renton):



Pues eso, como niño cercano a la treintena que vuelve al hogar materno por las circunstancias, veo a muchos amigos de la infancia que parecen haber seguido los consejos del padre de Tyler y que se han marcado como metas la lista de prioridades enumerada por Rents. Yo, por mi parte, sigo haciéndome la misma pregunta. :-)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy de acuerdo, solo que yo creo que es a los 30 cuando se hace uno adulto en la sociedad actual, menudo cambio con la generación de nuestros padres no? es que hemos cambiado pasarnoslo bien ahora y "sacrificarnos" después y a ellos les toco sacrificarse (de verdad, sin tener vacaciones algunos años incluso) de jovenes y ahora disfrutan. Somos el fruto de recibir más de lo que necesitamos por la frustración de nuestros padres...así nos va.

Natso
p.s. me encanta leerte de nuevo a ver si se me pega algo y empiezo yo ^__^

Anónimo dijo...

VOS SABÉS que me adornan muchos más años que a Usted, y he pasado por las fases de Tyler ... incluso por la última que cita al final de su reflexión ... y tras mí arduo caminar sólo he encontrado vacío, soledad y he caído en la pasividad ... pero lo bueno de todo esto, es que al final todos acabamos abriendo nuevas sendas, incluso en terrenos pisoteados ... VOS SABÉS ... puede ser esta la solución??. Maese

Txetun: dijo...

Bonita reflexión, maese; de hecho es digna de figurar en un libro y la comparto en absoluto. Lo mismo que la de Natso. Yo creo que las sendas que marca el padre de Tyler no están mal. Yo hasta envidio el que las sigue y acaba encontrando la felicidad. El problema está en tratar de obligarnos a todos a ir por esas sendas. Y es que ya lo decía Aristóteles, que la verdadera Ética consiste en que cada uno busque lo mejor para sí. Sin entrar en discusiones sobre lo que eso implica para la necesidad de reglas, normas, leyes... todo lo demás es moral impuesta y nosotros somos seres bastante amorales (aunque con un sentido ético impecable)

Gracias a los dos por tomaros la molestia de compartir vuestros pensamientos. :-)